Hay que tener talento, en cualquier ámbito de la vida, para estar en el lugar adecuado, en el momento adecuado, y Colin Young-Wolff, supo hacia donde mirar cuando T1 sucumbió en la final de Worlds 2022.
Para muchos aún puede ser un recuerdo que lastime, pero la verdad es que a la mejor fotografía de esports en el año, no se le puede ignorar.
Y es que, Faker, es su protagonista, como no podía ser otro. La leyenda del videojuego, alcanzó otra final del mundial, luego de aquella fatídica derrota contra Samsung Galaxy en 2017. Allí, pudimos ver una de las escenas más dolorosas para los fanaticos del competitivo, pues la mayor figura que alguna vez ha tenido este juego, cayó, y cayó de una forma que los seguidores no lo olvidarán, pues SSG pasó completamente por encima de SKT, y nos dejó la imagen de Faker llorando desconsoladamente, mientras sus rivales celebraban con total euforia.
Para este 2022, vimos a un Faker mucho más maduro, liderar a un grupo de muy talentosos jóvenes hasta el punto de llegar a la final como principales favoritos, luego de que por su bracket se vieran muy superiores, y que el equipo que los venció en la final de la LCK, cayera contra DRX. Al finalizar la final, Colin, el fotografo estadounidense, capturó el momento en el que Faker, se dio cuenta que su talentoso y joven soporte, Keria, luego de haberlo dejado todo en la final y haber sido incapaz de levantar el título, se desplomó a llorar tal como lo hiciera él en 2017.
Las redes, inmediatamente empezaron a compartir la imagen, y no demoró mucho en salir un edit, con la silueta de Faker sobre Keria, con la misma posición de llanto que la leyenda tuvo en 2017, pero ahora, con la vista más madura, de un Faker con mayor experiencia, sabiendo exactamente, lo que sentía Keria en ese momento.
No nos queda más que felicitar a Colin Young-Wolf, ganador del premio, y autor de una de las más grandes postales, de la historia de este videojuego.
